El test de osmolaridad: ¿En qué consiste?
22/11/2024
La terapia con luz pulsada intensa regulada (IPL) es un tratamiento para la blefaritis posterior o la disfunción de la glándula de Meibomio.
Una luz policormática generada produce pulsaciones de luz homogéneas, cuyo objetivo es estimular las glándulas de Meibomio de los párpados. Estas glándulas, que liberan lípidos, son una parte importante de la película lagrimal. Cuando estas glándulas no funcionan correctamente, las lágrimas se evaporan rápidamente y provocan síntomas de ojo seco.
El oftalmólogo especializado en ojo seco primero realiza una serie de pruebas para verificar el estado de las glándulas de Meibomio, incluido el tiempo de ruptura de la película lagrimal y la meibografía.
Si las glándulas están afectadas y el paciente presenta síntomas a pesar del tratamiento convencional, se recomienda la terapia de luz pulsada intensa regulada para estimular el correcto funcionamiento de las glándulas de Meibomio.
Pueden ser necesarias al menos tres sesiones de tratamiento y, en el peor de los casos, requerir una cuarta sesión. Este tratamiento es especialmente efectivo en pacientes con rosácea.
La terapia de luz pulsada intensa regulada es un tratamiento que se realiza en la consulta y dura entre 10 y 15 minutos. El paciente está acostado boca arriba en una silla reclinable.
Se inspecciona el color de la piel y la máquina se ajusta a la intensidad adecuada según dicho color de la piel del paciente. Se aconseja no ponerse maquillaje ni cremas faciales antes del procedimiento. La cara se limpia a fondo con agua micelar.
Cualquier mancha oscura, pecas o lunares están cubiertos con adhesivos o marcadores de lápiz facial, y los ojos con gafas protectoras. Se coloca una gruesa capa de gel frío a ambos lados de la cara, desde la nariz hasta las sienes.
Se aplican cinco pulsos de luz a cada lado de la cara, y en cada pulso el paciente debe mantener los ojos cerrados. El gel se retira de la cara, la cual se limpia nuevamente con agua micelar y se aplica crema protectora solar de alta protección en el área tratada. Se aconseja evitar la exposición al sol y aplicar crema de protección solar en el área tratada durante una semana tras el tratamiento.
Nuestro protocolo de tratamiento consiste en realizar las sesiones secuencialmente: Día 1, día 15, día 45 y, en los casos en que se necesite una cuarta sesión, día 75.
La mejoría sintomática subjetiva se observa desde la segunda y la tercera sesión en adelante. Los pacientes notan menos enrojecimiento, menor sensación de arenilla y de cuerpo extraño, más comodidad al usar pantallas u ordenadores y una menor necesidad de poner lágrimas artificiales.
Tras la última sesión de terapia con luz pulsada intensa regulada se repiten las pruebas de imagen tales como el tiempo de ruptura de la lágrima. Los pacientes muestran una mejoría en su meibografía, incluso si existe una atrofia severa de las glándulas de Meibomio.
Se puede notar una sensación de ardor durante el tratamiento, pero esto es poco frecuente y depende de la tolerancia al dolor de cada persona. El área tratada puede quedar enrojecida durante unos días.