La cirugía del iris: avances y aplicaciones
24/12/2024
28/11/2018
Lagoftalmo es la imposibilidad de cerrar completamente el ojo, dejando un espacio entreabierto y expuesto entre el párpado superior y el párpado inferior.
Al quedar la superficie ocular expuesta y sin un parpadeo completo, la película lagrimal que cubre el ojo tiende a desaparecer, provocando sequedad ocular, lo cual predispone a sufrir infecciones y úlceras en la córnea que pueden afectar seriamente la calidad de la visión.
El paciente puede percibir que se le queda el ojo entreabierto al intentar cerrarlo. Asimismo, puede notar síntomas de sequedad ocular tales como sensación de cuerpo extraño, lagrimeo, enrojecimiento, dolor o visión borrosa, en un grado variable.
Una de las causas más habituales de lagoftalmo es la existencia de parálisis facial que imposibilita la correcta función del músculo orbicular de los párpados (encargado de cerrar el párpado) y ocasiona la caída del párpado inferior.
En ocasiones puede ser consecuencia de algún factor externo como una intervención quirúrgica que se realiza sobre el párpado, por ejemplo al extirpar un tumor o al practicar una blefaroplastia.
También puede estar ocasionado por exoftalmos (salida hacia fuera del globo ocular) en pacientes afectos de orbitopatía tiroidea o bien por cicatrices secundarias a traumatismos o quemaduras que afectan al párpado y su funcionamiento.
Para el tratamiento es imprescindible la utilización de pautas intensivas de colirios y pomadas lubricantes con el objetivo de que el ojo permanezca lubricado y protegido. Por la noche es indispensable tapar el ojo, prefiriéndose la oclusión húmeda, la cual se realiza con parches especiales.
Existen casos severos de lagoftalmo que obligan a ocluir y, en casos prolongados, a realizar tratamiento quirúrgico. Según la causa puede tratarse mediante la colocación de una pequeña pesa de oro situada en el párpado superior, la cual gracias a su peso y al efecto de la fuerza de gravedad, favorece el cierre completo de la hendidura palpebral en casos de parálisis facial.
En el párpado inferior, la cirugía más empleada para corregir la eversión o descenso del párpado es la tira tarsal lateral, que consiste en mejorar la tensión del mismo reanclándolo al reborde de hueso lateral.
O bien cirugía reconstructiva palpebral en pacientes afectados de cicatrices causantes del lagoftalmo. En todo caso, salvo que exista un alto riesgo para el ojo, el procedimiento quirúrgico se suele realizar al cabo de un tiempo de presentarse la causa del lagoftalmo (normalmente pasados varios meses), una vez se ha comprobado que no se ha producido, ni parece posible, una mejoría espontánea.